Katherine Lee Astor Róndon
Ciencias de la Comunicación – UDLAP
El próximo domingo 6 de
mayo se llevará a cabo el primer debate entre los candidatos a la presidencia,
y como es de esperarse ya han comenzado a surgir los problemas entre los
equipos de campaña y el órgano regulador de este evento. La noticia publicada el 29 de abril por el
periódico El Universal: IFE refuta a AMLO; debate permite la confrontación, da
a conocer que el candidato Andrés Manuel López Obrador considera que el debate
está hecho para que no se afecte al candidato Enrique Peña Nieto porque las
participaciones serán apenas de dos minutos, lo cual es un tiempo insuficiente
para presentar propuestas y debatirlas. Por su lado el consejero presidente del
IFE, Leonardo Valdés asegura que el debate sí permitirá una autentica
confrontación de ideas pues se cuenta con un amplio espacio para la réplica y
la contrarréplica, y asegura además que el equipo de AMLO participo en el
diseño del formato que se utilizará en el encuentro del próximo domingo.
Entiendo
que para AMLO esto de los debates sea muy importante, ya que son su único
fuerte en comparación con los otros candidatos, y también porque en el 2006 su
decisión de no asistir al primer debate fue la razón de que perdiera las
elecciones. En mi opinión considero que este va a ser el evento decisivo para
aquellos que no saben por quién votar y para que los número en las encuesta
bajen y suban; si AMLO logra aprovechar los errores que cometan sus
contrincantes y se destaca como un buen orador derivaría entonces en una alza
de puntos a su favor. Pero también se encuentra el factor PRI, ya que si
Enrique Peña Nieto logra debatir los temas de manera excepcional y sin cometer
una de sus esperadas metidas de pata, entonces el camino a la silla
presidencial estaría libre. En cuanto a Josefina Vázquez Mota, se puede esperar
todo de ella, desde una buena actuación hasta una catástrofe, depende de cómo
se desenvuelva y las propuestas que presente el gran día.
El
debate entonces será éxito para unos y fracasos para otros. Porque si en la
algo va a estar pendiente el pueblo mexicano, es en los errores que puedan
llegar a cometer los candidatos, más que en las propuestas y los programas que
estos vayan a ofrecer. Por eso es necesario que los candidatos se preparen
durante esta semana en los temas que se van a debatir, y también es esencial
que los equipos de campañas acepten la invitación de Leonardo Valdés y acudan
al lugar del debate, conozcan el espacio y con ello tengan la certeza de que
todo funcionará de manera óptima. Pero dejando de lado la confrontación, se
espera que cada equipo presente programas de gobierno concreto y coherente que
busquen la rápida estabilidad y mejora del país y no solo promesas para salir
del paso.
Bibliografía: http://www.eluniversal.com.mx/notas/844368.html
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