Encarcelan y multan con $24 mil 700 a niña tzotzil por abandonar a su esposo.

Mariana Enríquez Lizárraga.

Política Mexicana Contemporánea.

12 de marzo, 2014.

Encarcelan y multan con $24 mil 700 a niña tzotzil por abandonar a su esposo.

El pasado martes 11 de marzo del año en curso, Proceso publicó esta noticia. Brevemente, la noticia habla de que en un poblado indígena de Chiapas una menor tzotzil de 14 años fue multada con $24,700.00 y detenida por abandonar a su esposo. El juez ordenó no únicamente multarla con una estrepitosa cantidad, sino también detenerla por ser incapaz de poder cubrir la multa después de que su esposo la acusara de abandono y de haber gastado $15,000.00 en la boda esperando que, tras haberlo dejado, la familia de la menor le reembolse la cifra incluyendo los intereses, sumando el total de $24,700.00. La pareja contrajo nupcias en agosto del año pasado pero tres meses después se separaron y la niña tzotzil regresó con su familia al poblado indígena de Tojchotic, Chiapas.

El pasado domingo 9 de marzo la menor fue llevada a la prisión municipal de San Juan Chamula y las autoridades advirtieron que si la familia no cubre con la cifra estipulada, la pequeña no será liberada.

NOTA COMPLETA: http://www.proceso.com.mx/?p=367013

No es nada nuevo que gran parte de las injusticias que vive nuestro país ocurren dentro de poblados indígenas, sin embargo encuentro esta noticia verdaderamente indignante. Empezando por el hecho de que una persona no puede contraer matrimonio antes de los 18 años en México (Modificación del Código Civil Federal en marzo del 2009), siguiendo con que el juez haya aprobado una demanda tan ridícula y que hubiese procedido me parece increíble y, para terminar, puedo asegurar que hay miles de casos más en la zona que verdaderamente requieran la atención y el tiempo de las autoridades (entiéndase violaciones, invasión a la propiedad privada, explotación, entre tantísimas que hay).
Consultando esto con un familiar abogado, me informó de ciertos puntos que uno puede llegar a desconocer tales como que a pesar de que la edad legal mínima para casarse es de 18 años los menores de edad se pueden casar a partir de los 14 con la autorización del padre/tutor y/o juez; en éste caso la menor contaba con la autorización de sus padres. Otro punto es que esto no se hizo ante la justicia ordinaria, sino fue ante un juez de paz y conciliación indígena lo que significa que más que aplicar la ley, aplicaron los usos y costumbres indígenas. Sin embargo, (en teoría) si la familia de la menor acude a un juzgado federal y se ampara deben de dejarla en libertad, ya que lo que se hizo en éste caso va en contra del artículo 17 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que dice que nadie puede ser encarcelado por deudas de carácter civil.

CONCLUSIÓN.

 

No para de sorprenderme cómo es que habiendo centenares de problemas a lo largo del país sólo ciertos procedan a la corte y que entre los que pasen haya unos tan ridículos como éste. No me considero feminista ni mucho menos, pero es deprimente como demandas de éste tipo proceden y que los jueces (sigan la ley que sigan) no conozcan las “reglas del juego” del país. Además, como ya mencioné previamente en mi entrada, considero que hay casos que verdaderamente requieren la atención de un juez.
Finalmente, de verdad espero que la familia de la menor acuda a un juzgado federal para solucionar éste terrible conflicto y que verdaderamente se haga justicia...