Por: Humberto Medrano Mendoza
11-09-2012
Fuente: http://www.proceso.com.mx/?p=319463
11-09-2012
Fuente: http://www.proceso.com.mx/?p=319463
La noticia se trata del discurso que anunció el rector de
la UNAM José Narro Robles acerca de el cambio de rumbo que México necesita y el
estancamiento en el que ha vivido estos últimos años, durante la presentación
del libro 2012: Reforma del estado y fortalecimiento de la nación.
El rector Narro, dijo que “Se requiere un cambio de rumbo, un viraje
sustantivo en el camino, pues el que hemos transitado en las últimas décadas no
nos ayuda a resolver los problemas de siempre, tampoco los de nuevo cuño, y
menos anticipar los que ya tenemos enfrente”, es decir, que se necesita resolver
los problemas de otra forma en la que se han estado haciendo.En mi opinión, gracias a la globalización,
se ha desarrollado un mercado mundial en el que México se ha introducido no tan
exitosamente; así mismo la globalización y el mal gobierno han abierto una brecha de desigualdad en la
sociedad Mexicana.
También señaló que a México le urge una
refundación, una nueva constitución que erradique el estancamiento, la
desigualdad, la pobreza y los malos manejos gubernamentales; en lo estoy de
acuerdo por una parte y por otra no, se necesita hacer modificaciones a la
constitución ya que lleva mucho tiempo (desde que se elaboró) en la cual no se
le ha modificado gran cosa, mientras el país y la forma de gobierno han ido
evolucionando, por otra parte, no solo el cambio de constitución o leyes
cambiaría al país, ya que se necesita un cambio en la élite política. Un fuerte
problema de corrupción, violencia y actos que han perjudicado al país, es información
que tendría que analizarse para que se convirtiera en inteligencia, cosa que no
se ha hecho durante muchos años.
El rector expone que, los Mexicanos, debemos
decidir si somos capaces de aceptar el desafío, de hacer el diseño
institucional y programático que se requiere, o si sólo habremos de trasladar
los moldes de otras sociedades, de no estar a la altura del reto y de nuestras
responsabilidades, o incluso dejar la tarea a las próximas generaciones que
“con toda razón tendrán la capacidad de recriminar nuestra determinación de no
hacer lo que nos toca”.
Esto, quiere decir que la juventud mexicana
es la que tiene el potencial de cambiar ésta estructura en la cual el país se
ha ido desarrollando; aumentar nuestra educación y ser capaces de combatir la corrupción
y la inseguridad que se nos ha dejado. Personalmente, creo que nuestra
generación tiene que hacer un cambio ahora o será muy tarde, hay que
prepararnos profesional y cívicamente para enfrentar los problemas que nos
afectan hoy en día. Aplicar el poder de ciudadanía que tenemos para corregir el
camino del país, dejar de ser persuadidos por los medios de comunicación mediocre
y comenzar a leer, será el primer paso que hay que hacer.
Concluyendo a todo esto, el rector indicó que
“Las transformaciones traen aspectos positivos, y los tiempos por venir tendrán
que ser mejores. Lo que podemos debatir es por dónde enderezar el rumbo, a qué
velocidad emprenderlo, y por dónde empezar”. Si esto se efectúa, México podrá evolucionar para llegar a ser un mejor país.
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