El monopolio de violencia

“Empleado encontró 16 balas en el techo de Cinépolis Ermita”

                                                                                  Emil Lindblad Kernell

                                                                            14 de noviembre del 2012

Proceso: http://www.proceso.com.mx/?p=325231

En un cine (Cinépolis) en el D.F. un empleado encontró balas (16 en total) en el techo dentro del cine. El mismo cine donde se murió un joven unos días antes. Para esclarecer el deceso del niño están ya unos 500 elementos policiacos trabajando.

La ocurrencia de este tipo no es la primera en los últimos años, y lo más probable es que hay más situaciones para venir. Quien lo hizo todavía no se sabe pero la gente debe de poder adivinar lo que ha pasado, más o menos.

¿Pero como puede suceder que hay 16 (16!) balas no encontradas por la policía cuando un niño fue matado? El poder que parece tener los que hacen eso es tremendamente grande. Después de lo sucedido, en un lugar central con mucha gente, debe de haber testigos, la policía no puede fallar en encontrar todas las balas y alguien debe de hablar.

Por lo que parece los que hacen estos crímenes ya tienen demasiado poder que todos o están ayudándoles o tienen demasiado miedo para poder actuar de forma correcta en la situación.

Aunque puede ser que esta situación puede ser algo totalmente diferente todavía llama la atención que el estado ha perdido su poder de violencia. En un país democrático que funciona siempre será castigado el que usa violencia en contra de las leyes. En México parece que así no sucede. Después del intento fallido de la guerra contra el narco es aun mas obvio que el monopolio de usar violencia ya no tiene el estado.

De unas maneras u otras se puede decir que hay dos estados en México. Uno, el estado de México, que puede tomar todas las decisiones fiscales, como de impuestos y otras cosas (aunque que lo de impuestos tampoco parece funcionar bien). Y dos, el estado de los narcos, que evidentemente ya tienen un poder tremendamente grande hablando de la violencia.  Por lo leído parece que también tienen sus escuelas etc., lo cual hace que puede ser un estado con mejor rendimiento que el “estado real”.

El problema es que este ”otro estado” no ha sido elegido ni mucho menos, han ganado su poder con el uso de la violencia y el miedo.  Lo difícil es como reventar la situación. Si se elige la vía de la violencia tienen que estar seguros de ganar esta batalla porque si no... ya sabemos lo que pasará. Otra vía de ganar la batalla puede ser con educación. De todos modos, da igual que vía eligen, los impuestos son importantísimos, para tener el dinero suficiente.

¿Y cómo solucionar este problema? ¡Eso es para otro blogpost!